El 23 de Septiembre se celebra el Día Mundial del Perro Adoptado. La celebración nace con la intención de concienciar a la población sobre el abandono de animales domésticos y la importancia de adoptar perros y gatos en vez de comprarlos. Porque todos merecemos una segunda oportunidad, y por supuesto, es necesario mentalizarse de que tener un animal doméstico conlleva una responsabilidad.
Consejos de educación de un perro adoptado
Cuando adoptamos un perro debemos de ser pacientes y tener empatía con el animal. Sobre todo si viene de una protectora, una perrera o un refugio, el cambio de entorno será muy grande para él, y necesita un tiempo para acostumbrarse a la nueva situación.
1. Muéstrate relajado y ofrécele un ambiente de calma.
Los primeros días son cruciales y es muy posible que el perro se muestre nervioso, sobreexcitado, perdido e incluso puede que agresivo.
Que el animal tenga un espacio de descanso, cómodo y limpio puede ayudarle a sentirse mejor.
2. No le satures de órdenes.
Un perro recién adoptado suele estar sometido a estrés por lo que no es bueno castigarle en exceso, gritarle o exigirle que cumpla las órdenes desde el principio. Necesita un tiempo para aclimatarse y conocerte.
3. Conocerse poco a poco.
Cada perro tiene una personalidad propia, un carácter, ciertas manías… durante un tiempo lo mejor es que se conozcan. Obsérvale, fíjate en que comida o qué juguetes le gustan, cuándo está más feliz, contento, o siente miedo o demanda cariño.
Él también debe conocerte a ti, tus horarios, tus gustos, tu carácter…. Poco a poco debes ganarte su confianza, por eso, por ejemplo, las primeras veces que salgas a pasear con él es bueno que no sueltes su correa, todavía no te conoce y además no sabemos cómo reaccionará en espacios públicos y abiertos o con el resto de personas o perros.
Aprovechemos la celebración del Día Mundial de Perro Adoptado para enaltecer ese bonito momento que es dar una segunda oportunidad al animal y dejar que forme parte de nuestra familia.
¡Él te lo agradecerá!